En pleno debate sobre el proyecto de ley de Declaración de Emergencia Económica, el senador nacional por Córdoba Carlos Caseiro desató una polémica al poner en duda que la “clase política” tenga que hacer esfuerzos como el resto de la sociedad. Éste sempiterno funcionario, oriundo de las sierras cordobesas, ha desempeñado su rol en la “clase política” en distintos cargo, algunos con mucha polémica. Igual que sus familiares, su hijo y su hija, como su millonaria esposa Alicia Narducci.
Por Lea Ross | @Leandro Ross
Una fuerte polémica se desató con las declaraciones del senador nacional por Córdoba Carlos Caserio, que supuestamente está actualmente distanciado de su jefe, el gobernador de la provincia Juan Schiaretti, y adhiere ahora al presidente de la Nación Alberto Fernández. Quedando empero la duda en muchos cordobeses, si Caserio es el caballo de Troya del ahora presidente Fernández en Córdoba. O si es el caballo de Troya de Schiaretti en el flamante gobierno nacional.
Ocurrió en plena discusión parlamentaria del proyecto de ley que recientemente declaró la emergencia pública en materia económica, financiera, fiscal, administrativa, previsional, tarifaria, energética, sanitaria, y social. Que incluye el cese de la movilidad jubilatoria impuesta por Cambiemos en 2017, más un sustancial aumento de retenciones impuestos de toda índole, etc.
Pero esa emergencia para todos y todas según Caserio no alcanzaría a la “clase política”, como si estuviéramos en los tiempos del rey francés Luis XVI, que terminó con su cabeza en la guillotina. Ante la pregunta por parte de una movilera de la televisión, sobre si la clase política no debía también hacer un “esfuerzo”, en referencia a ceder parte de sus abultados sueldos, Caserio contestó: “Hablar del esfuerzo de la clase política es no entender al Estado. La clase política no es una clase productiva o fundacional. No hace esfuerzos, dicta normas”.
A partir de ese escándalo, y con el anuncio del jefe de gabinete Santiago Cafiero de que el Gobierno también está preparando “ajuste en el gasto político”, el legislador oficialista cordobés declaró ante la radio Cadena 3 su arrepentimiento sobre sus dichos: “La verdad que me expresé mal. No fue con mala voluntad. Aprovecho para pedir disculpas (…) Yo creo que (ajustar los salarios de los funcionarios) sería un buen modo de que la clase política demuestre que tenemos colaboración”.
Sin embargo, según una de las últimas declaraciones juradas presentadas ante la Oficina Anticorrupción, con fecha 2016, el solidario senador Caserio, que carece de título o profesión alguna, cuenta entre sus patrimonio una histórica casa en la ciudad de Villa Carlos Paz con un módico valor que estimó a la presentación del trámite, de 4,5 millones de pesos.
También cuenta con dos autos de modelo reciente, marcas Renault Sedan y Chevrolet todo terreno de 365.000 y 363.500 pesos respectivamente. Y una notable liquidez que sería el cielo para muchísimos argentinos, que no pueden llegar a fin de mes o están ahorcaos con sus tarjetas de créditos.
Ya que detenta una caja de ahorros con 124.000 pesos. Cajas de ahorro en moneda extranjera por 98.584 dólares; equivalentes actualmente a entre seis y ocho millones de pesos, según el dólar que se mire. Y otros 31.533 dólares en efectivo, más 270 mil pesos, etc. De esa manera la fortuna declarada de Caserio actualizada a hoy ronda entre los 30 a 35 millones de pesos.
La “esforzada” esposa de Caseiro
Pero lo anterior no es todo. A los “esfuerzos” de Caserio se suman los de su esposa Alicia Isabel Narducci. Quién durante el gobierno municipal de su esposo en la localidad serrana de Valle Hermoso, ejerció el cargo de secretarìa de Acción Social, área destinada siempre a juntar votos para ganar las elecciones y controlar el territorio.
Luego pasó a ser presidenta del Concejo Deliberante de esa localidad. De allí, saltó a la provincia como diputada provincial para el PJ. Después se desempeñó como diputada nacional, para retornar luego como legisladora provincial, durante el tercer mandato del gobernador José Manuel de la Sota (2011-2015).
Finalmente, desde diciembre de 2015 hasta la actualidad, es vocal del controvertido Ente Regulador de los Servicios Públicos de la provincia de Córdoba (ERSEP). Donde sin conocerse las competencias que tiene para esa actividad regulatoria especializada, año a año habilitó sustanciales aumentos de las tarifas de electricidad y del agua potable de la ciudad de Córdoba. Cuya concesión está a cargo de Aguas Cordobesas SA, perteneciente al Grupo Roggio, imputado en la controvertida causa de Los Cuadernos.
Al igual que su marido, la solidaria Alicia, según sus últimas declaraciones juradas, cuenta con una alta liquidez por fuera de las propiedades de su esposo Caserio. Entre ellas, un depósito de 150.000 pesos, cuando el dólar cotizaba en ese entonces en el 2015 en menos de diez pesos, más unos 17.000 dólares y bienes por más de 103.000 pesos. O sea un patrimonio actualizado superior a los tres millones de pesos sustancialmente líquido.
De tal palo…
No solamente el solidario Caserio y su solidaria esposa Narducci son dos eternos funcionarios públicos del riñón de Schiaretti. Sino que sus hijos Mariana y Hernán también lo son.
Mariana Alicia Caserio tuvo como primer cargo público la Subdirección de Jurisdicción de Integración Cooperativa de la Secretaría de la Juventud de la Provincia de Córdoba. Durante el tercer mandato de José Manuel De la Sota (2011-2015), al igual que su madre Alicia, pasó a ejercer la vicepresidencia del ERSEP, donde también sin conocerse las competencias que tiene para ejercer esa actividad regulatoria especializada, habilitó los tarifazos en contra los cordobeses.
Para el 2015, cayendo ya el cordobesismo en despotismo de cuarta, la joven Mariana realizó un enroque con su propia madre Alicia. Ella pasó al ERSEP mientras que Marianita arribó a la legislatura unicameral de Córdoba. Cargo que la hija de Caserio renovó este año, luego de candidatearse como intendenta de la ciudad de Villa Carlos Paz, saliendo en tercer lugar.
A su vez, su hermano Hernán Miguel Caserio, contador público, se desempeñó hasta el 2008 en la Subsecretaria de Coordinaciòn y Administración del Ministerio de Agricultura. Sin embargo renunció luego de denuncias que el Frente Cívico -partido liderado por Luis Juez aliado a Cambiemos- hizo por el nombramiento de decenas de familiares de funcionarios de Schiaretti en el gobierno provincial. Nepotismo crudo que era irrefutable con solo mirar los cargos y los apellidos.
Tras ello, el hijo del actual senador del Frente de Todos se retiró de la política, para pasar a desempeñarse en la actividad privada. En servicios de asesoramiento a empresas, y de publicidad, área en la que el gobierno cordobesista gasta grandes sumas, dedicándose también al ciclismo amateur.
¿Quien es Caserio?
Carlos Caserio, senador nacional, actualmente uno de los principales referentes del presidente Alberto Fernández en Córdoba, carente de profesión alguna, comenzó a trabajar como maestro en una escuela de la localidad de Martín Coronado, en el partido bonaerense de Tres de Febrero.
En plena dictadura, militó en la organización guerrillera Montoneros, cuya actuación lo obligó a refugiarse en la provincia de Santa Fe. Allí trabajó en la fábrica de tractores alemanes Deutz. Hasta que finalmente, a partir de los años ochenta, se trasladó a la localidad cordobesa de Valle Hermoso, para desempeñarse como encargado de un hotel sindical.
Desde ese lugar estratégico en el centro del poblado y pujante Valle de Punilla y con mucho tiempo libre por delante, Caserio tejió un importante poder político que contribuyó a la llegada de De la Sota y Schiaretti a la gobernación de Córdoba
Su ascendencia comenzó en los dos últimos dos años de gobierno del peronista Carlos Saúl Menem (1997-1999) cuando Caserio pasó a desempeñarse nada menos que como subsecretario de Mercados y Alimentos de la Secretaría de Agricultura y Ganadería de la Nación. Despacho adonde recalaron varios de los futuros y cuestionados funcionarios de Schiaretti y De la Sota.
Como son Marcelo Falo, denunciado de librar centenas de cheques sin fondo. Ángel Elattore, ex ministro de Finanzas de De la Sota, ártifice de la quita a los jubilados. Roberto Walter Poplawsky, ex funcionario de De la Sota devenido a empresario de la obra pública. Y el operador Jorge “el Zurdo” Montoya, actual secretario de Integraciòn Regional, vinculado económicamente a la siniestra “patota de la Esma”.
Ver ESCANDALO: altos funcionarios de Schiaretti asociados con la “patota de la ESMA”
Ver El plan del gobernador Schiaretti para enfrentar a Alberto y Cristina
Durante el primer período como gobernador de José Manuel De la Sota (1999- 2003) el fallecido caudillo peronista se trajo de Buenos Aires a Caserio, Montoya, Poplawsky y toda la banda cordobesa que trabajaba con Menem en el ministerio de Agricultura, para ocupar altos cargos en su nuevo gabinete.
En esa oportunidad, el actual senador del Frente de Todos, presidente nada menos que de la Comisión de Presupuesto, pasó a desempeñarse como ministro de Obras Públicas de la provincia. Cargo desde donde con su firma, le adjudicó millonarios y polémicos contratos a la constructora IECSA, por entonces a cargo del ex presidente Mauricio Macri, y a Electroingeniería.
Ésta última constructora, gracias a la birome de Caserio, debutó como constructora de Obra Pública de la provincia, construyendo 200 escuelas con altísimos sobreprecios y estafa a los proveedores. A la par que el hoy condenado que cumple pena de prisión efectiva, Ricardo Jaime, se desempeñaba como secretario de Educación.
Fue en ese contexto cuando Caserio se compró su actual casa en la ciudad capital del turístimo del interior, Villa Carlos Paz, ubicada en la zona sur de Punilla, tasada en un millón doscientos mil dólares. Hecho que fue denunciado por el mediático abogado cordobés Alejandro Zeverin quien, al día siguiente de producida la denuncia, declaró también haber sido víctima de un atentado contra su vida, cuando balearon su automóvil en la Ruta 9. Como consecuencia de este episodio, decidió desistir con sus denuncias.
A raíz de este hecho, su por entonces compañero peronista Luis Juez, que ocupaba en esos tiempos la FIscalía Anticorrupción creada por De la Sota, citó a Caserio a los efectos de aclarar su sospechoso enriquecimiento patrimonial, en lo que se convertiría en su primera investigación contra el gobierno delasotista. Pero Caserio jamás concurrió a citación alguna y retrucó: “¿Sabés quién soy yo? Soy el cajero”, reveló tiempo después Luis Juez.
Caserio privatizador y cercano a Milani
Además de su dudoso patrimonio y firmas a favor de las empresas Electroingeniería e IECSA, en cuanto a su política de gobierno lejos estuvo de ser solidaria y a favor de los que menos tienen. Por el contrario, apenas asumió su primer mandato, De la Sota y su ministro Caserio emprendieron un “menemismo tardío” tratando de privatizar las empresas públicas corodobesas. Entre ellas EPEC, Lotería de la Provincia, y el Banco de Córdoba.
“A lo mejor hubo privatizaciones (en el ámbito nacional realizadas por Menen) que no fueron exitosas. Nosotros decidimos llevar adelante un proceso a la cordobesa, que va a ser exitoso” proclamó en esa oportunidad Caserio al diario La Voz del Interior (Grupo Clarín) en junio de 2001.
Sin embargo, salvo los casinos de la Lotería, que quedó en manos de Roggio, De la Sota y el actual senador no pudieron concretar el remate de ninguna de las empresas públicas. Pero sí se dieron el lujo de crear en el año 2002, agencias que administran los fondos públicos de inversión sin control de ningún tipo.
Como la Agencia Córdoba de Inversión y Financiamiento (ACIF) encargada de gestionar los créditos internacionales para las obras del Gobierno, que bajo el mando de Caserio, se adjudicaban muchas de ellas a Macri y Electroingeniería. Donde el primero en presidir esa agencia, e incluso sindicado de ser el mentor de ella, fue el hoy empresario porteño Horacio Miró. Señalado públicamente de ser el testaferro de De la Sota, junto con su socio Roberto Poplawsky. Siendo a su vez, ambos socios de IECSA en dos mega edificios en Puerto Madero.
Ver Tinelli y Milani, los poderosos amigos de Miró, el “testaferro” de De la Sota
En este vinculo entre Miró y Caserio, aparece una figura de lo más inesperado: el ex jefe del ejército del kirchnerismo César Milani, acusado y sobreseído de haber perpetrado crímenes de lesa humanidad en la última dictadura. Miró es consuegro del militar.
El actual diputado nacional y ex embajador en Ecuador Luis Juez, dijo al respecto: “Miró es un tipo muy vinculado a Carlos Caserio, un dirigente delasotista, del departamento de Punilla. El secretario privado de Carlos Caserio, cuando fue ministro de obra pública, fue el Rodi (Rodolfo) Milani, hermano del general Milani. Ambos son peronistas de Cosquín. Hay que darse una vuelta por allí para ver quien son”.
Precisamente, en la capital nacional del folklore, los Milani son conocidos por ser una familia de raigambre peronista en la zona, situada a tan solo pocos kilómetros de Valle Hermoso. La tierra desde donde la humilde familia Caserio se proyectó “esforzadamente” como clase política.
En esta trenza, aparece también en escena el conductor televisivo Marcelo Tinelli, recientemente convocado por Alberto Fernández para el lanzamiento de un programa social de lucha contra el hambre. Tinelli también compartió con el hijo de Horacio Miró la comisión directiva del Club Atlético San Lorenzo, durante la presidencia de Matías Lammens, actual ministro nacional de deportes de la Nación.
Ver Concubinato Schiretti & Macri (II): los negocios comunes del cordobesismo con el grupo Macri
A Caserio se lo conoce también como el Sr. de la Ruta Nacional 38, que atraviesa las principales localidades del Valle de Punilla cortándolas a muchas de ellas por el medio. Actualmente esa ruta es caracterizada por ocurrir siniestros viales por el descuido en que se encuentra, y por el desordenamiento territorial que produce en los pueblos, cuyos comercios están pegados a ese camino. E incluso se la ha sindicado de ser una ruta óptima para el transporte de mercadería en negro, en particular del narcotráfico.
En el año 2009, el entonces gobernador Schiaretti creó la Secretaría de Prevención de la Drogadicción y Lucha contra el Narcotráfico. Y puso al frente de ella a Sebastián García Díaz, un dirigente conservador del partido Primero la Gente, que priorizaba la lucha contra las drogas.
A los diez meses de asumir, García Díaz renunció ruidosamente, tras emitir un duro informe en el que alertaba sobre un agudo proceso de “favelización” en algunos barrios de la ciudad capital. Para lo cual proponía, entre otras medidas, que la policía controle las principales rutas de la provincia, por donde la cocaína pasaba sin traba alguna.
Este diagnóstico desagradó profundamente al ministro de Gobierno Carlos Caserio, considerado el Sr. y jefe político de la Ruta 38, quien desautorizó el informe y pidió la renuncia de García Díaz. Y a la par sucedió el hecho curioso que el automóvil del entonces ministro Caserio con este al volante, fue detenido y revisado por la Policía Caminera.
Lo cual causó un enorme desagrado en este y las autoridades de gobierno, que dispusieron que los policías cualquiera sea su nivel, debían memorizar los rostros de los ministros para que ello nunca más volviera a suceder.
supuestamente no detener ni multar a esos funcionarios. Gentileza: La Voz.
https://www.lavoz.com.ar/noticias/politica/caminera-tiene-que-memorizar-los-rostros-de-los-ministros
Por su parte el legislador y abogado Aurelio García Elorrio apuntó: “La ruta 38, que es la ruta de Caserio porque él es de esa zona, es una de las rutas más importantes del mundo, por donde pasa droga desde Colombia hacia Europa, y es la tarea que realizan los integrantes de una banda italiana… Como ministro de Gobierno, el dueño político de esa ruta, tiene la oportunidad de dejar un mensaje claro y puede decir ‘esa ruta la vamos a liquidar”.
Ver Narcordobesismo: según la DEA y De la Sota Córdoba está tomada institucionalmente por los narcos
El tango de Gardel y Le Pera dice que “veinte años no es nada”. Pero en Córdoba han permitido la instalación de un Unicato o cordobesismo, como en los tiempos de Julio Roca y Miguel Juarez Celman. Que ha hecho que sus integrantes, muchos de ellos provenientes de humildes orígenes, como Caserio y su familia, creen ahora como cortesanos del rey francés Luis XVI, pertenecer a una aristócrata “clase política”.-
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