En el “cordobesismo”, régimen político conservador que lleva 24 años en el poder, ahora liderado por Juan Schiaretti, ex miembro de la Fundación Mediterránea, funcionario de Domingo Cavallo y Carlos Menem, hay un discurso común: históricamente, la provincia de Córdoba fue discriminada por el gobierno central y ahora más que nunca por el kirchnerismo, que manejan todo con absoluta arbitrariedad desde “el puerto”. Es decir desde Buenos Aires, solamente a favor de ellos.
Este discurso llorón y “victimista” echó músculos allá por 1976, plena dictadura militar, gracias a la Fundación Mediterránea comandada por Cavallo y acompañado luego por Schiaretti, cuyo nombre ya se planteaba como un contrapoder al puerto.
Y resultó ser muy efectivo para todos los gobiernos radicales y peronistas que comandaron esta provincia desde 1983 a la fecha. Dado que remueve las entrañas del pueblo cordobés que en su ADN, como una especie de hermano menor, posee un histórico resentimiento con los “porteños”. Los que para el “cordobesismo”, son todas aquellas personas que viven en la provincia de Buenos Aires y alrededores -AMBA- hasta casi Rosario. No las que viven en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires -CABA- y que son a las que verdaderamente les cabe el gentilicio.
Por eso, una y otra vez, desde hace años, Schiaretti y los grandes medios que viven de su pauta oficial, como el diario La Voz del Interior de Clarín o Cadena 3, instalan el relato que Córdoba es discriminada por “los porteños” y los K. Y que por eso nos va mal. El clásico “enemigo externo” que le permitió y permite al “Partido Cordobés”, en 24 años de poder, no reconocer ante la sociedad ningún error propio, trasladando siempre las causas de ellas a otros chivos expiatorios: hoy “los K”.
Y para ello cuenta ademas con el apoyo del grupo Clarín, tras la alianza estrategica que hizo Horacio Magnetto con el gobernador De la Sota en el 2009, para controlar el voto del ministro de la Corte Suprema Juan Carlos Maqueda, un íntimo de De la Sota propuesto a ese cargo por este, con motivo de la Ley de Medios.
Fue el gobernador radical Eduardo Angeloz quien, luego del retorno a la democracia en 1983, comenzó a emplear este discurso chauvinista y victimizante para hacer política. “El Pocho” llegó a hablar de Córdoba como una “isla”. Isla que, durante su tercer mandato se hundió, y cuyo mandato debió abandonar anticipadamente, rodeado de múltiples denuncias de corrupción. Entre estos el asesinato de un senador de su propio partido. Renuncia que la hizo acusando, por cadena de TV, al gobierno nacional de Carlos Menen y Cavallo de conspirar en su contra.
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Seguidamente, lo profundizó y llevó a otro estadio el peronista José Manuel De la Sota, ex gobernador de Córdoba durante tres mandatos (1999- 2015), quien el 7 de agosto del 2011, inmediatamente después de las elecciones provinciales, en medio de una oscura pelea política con Cristina Kirchner, dio nacimiento al “cordobesismo”. Régimen político casi feudal, que hasta el día de hoy gobierna Córdoba.
“Peronismo, radicalismo, socialismo, kirchnerismo no deben ser razones para dividirnos a los argentinos, hace falta que pensemos en grande…mucho más en grande. Le estamos poniendo nombre a esto que estamos haciendo desde Córdoba. Este modelo de crecimiento, que sigue produciendo cambios y transformaciones enormes, se llama cordobesismo y nació esta noche aquí” sentenció De la Sota tras ganar las elecciones en el año 2011.
Bajo el paraguas del “cordobesismo”, “el Gallego”, pasó a culpar de todo los males de su gestión a “los K”, con lo que siempre, desde el 2003 tuvo una relación ambigua. Hasta de la huelga de los policías provinciales acontecida en diciembre del 2013, que derivó en múltiples saqueos, cuya única responsabilidad era de De la Sota, empleador de los policías. Quién en el momento que ocurrieron los hechos más dramáticos, estaba en Panamá, el super paraíso fiscal del mundo, nadie sabe haciendo qué.
De esta manera, ya con una categoría aglutinadora, este relato “víctimista” del “cordobesismo”, fue mantenido inalterable por sus sucesor Juan Schiaretti, hasta el día de hoy, que sigue culpando de todos los males de su gobierno “a los K” y “el puerto”.
¿Hay discriminación o no?
Más allá de las palabras ¿qué dicen los números de esta supuesta discriminación del gobierno nacional a Córdoba? Al respecto, el Presupuesto General de Gastos del gobierno nacional para el presente año, aprobado por el Congreso de la Nación controlado en parte por el kirchnerismo en noviembre pasado, prevé millonarias erogaciones en obra pública en Córdoba para los próximos tres años.
Concretamente, según la planilla “Contratación de Obras de Inversión”, para los años 2023, 2024 y 2025 el gobierno nacional se comprometió a financiar 30 grandes obras públicas por un monto total de 78 mil millones de pesos a ejecutarse en toda la provincia de Córdoba. Principalmente en localidades con intendentes peronistas que responden tanto a Cristina Kirchner, Alberto Fernández, como a Juan Schiaretti.
Según el presupuesto aprobado, estos 78 mil millones llegarán: 2 mil millones de pesos para este año que tendremos elecciones presidenciales; 49 mil millones para el 2024; y 24 mil millones en el 2025, donde habrá elecciones legislativas nacionales para recambiar el Congreso. El saldo, unos 3 mil millones en el 2026.
Los Hoteles de Alessandri
Entre las obras a ejecutar hay 10 mil millones de pesos para la puesta en valor del hotel número 5 de la localidad serrana de Embalse. Ciudad en manos de Federico Alessandri, un ex delasotista, ex schiarettista, que la semana pasada acaba de lanzar, de mano del “albertista” Carlos Caserio, su precandidatura a gobernador de Córdoba por el Frente de Todos, para las elecciones que se desarrollarán este año.
“La precandidatura de Alesandri va en línea del cumplimiento de lo que escribimos en el documento de proponer a los cordobeses una propuesta de un peronismo progresista que represente los intereses de la gente, que nada tiene que ver con el mensaje de algunos que dicen ser peronistas, pero su discurso y acciones están alineado con la derecha que representa el macrismo”, dijo en su acto de lanzamiento el albertista Caserio, vicepresidente del Banco Nación. En alusión al gobernador Schiaretti y su posible reemplazante Martín Llaryora, intendente de Córdoba, que acaba de reunirse con Mauricio Macri.
Los hoteles de Embalse son siete en total. Los construyó Juan Domingo Perón. Están a cargo del gobierno nacional, son gemelos a los de Chapadmalal de Mar del Plata, y a pesar que en algún momento fueron motores económicos de la zona, desde hace años algunos lucen abandonados y destruidos. Entre estos el Nro 5. Siendo esta la primera vez en años en recibir una partida presupuestaria de esta envergadura (10 mil millones de pesos) para refaccionar un sólo hotel. ¿De acá saldrá la plata para la campaña de Alessandri?
La autopista de la rosca
Además del hotel de Embalse, el resto del presupuesto está concentrado básicamente en la construcción de una autopista -doble calzada en realidad- sobre la ruta nacional 158. Hoy una ruta simple que une las localidades de Río Cuarto con San Francisco y atraviesa la Autopista Córdoba Rosario.
Los llamados a licitación para esta obra acaban de ser anunciados en estos días, por el intendente de Villa María Martín Gil, ex secretario de Obras Públicas de Alberto Fernández, junto al titular de la delegación Córdoba de Vialidad Nacional, Federico Eslava. Dos albertistas, el primero de buena llegada a Schiaretti también, quienes anunciaron además que el costo de esta nueva autopista rondará los 140 mil millones de pesos. El mismo importe de la coparticipación por el cual Alberto Fernández y Horacio Rodríguez Larreta se están peleando y es de 130 mil millones.
Para esta obra de la autopista, el presupuesto del año próximo prevé 48 mil millones de pesos. Es decir, el 55% del total presupuesto asignado a Córdoba que es de 78 mil millones. Y un tercio de lo que saldrá toda la autopista (140 mil millones). Llegarán: 750 millones este año electoral, 24 mil millones en el 2024, y 14 mil millones en el 2025.
Además de sus costos, la mayor particularidad que presenta esta millonaria obra es que conectará las principales localidades de los actuales caciques del peronismo cordobés, en todas sus vertientes. Es, sin dudas, la autopista de la rosca para obtener votos en el Congreso.
La principal beneficiada será la ciudad de Villa María, una cuenca láctea, capitaneada por el albertista Gil, de muy buena llegada a Schiaretti. De hecho, hace dos semanas, poco antes de año nuevo, cuando Caserio anunció la precandidatura de Alessandri, Gil no sólo se hizo el gil y faltó, sino que al otro día estuvo en Villa María con Schiaretti, inaugurando una escuela juntos. O sea no apoya las críticas al gobernador del cordobesismo, ni a una lista propia del FDT para gobernador como quieren Alessandri y Caserio.
El usufructo se dará porque, de realizarse la obra, sobre Villa María se producirá el cruce central entre las dos principales autopistas que tendrá Córdoba: AU-Córdoba-Rosario y AU-Ruta 158. Quedando está en un posición estratégica con conectividad y fluidez con todas las principales ciudades de Córdoba y el país, como Córdoba, San Francisco, Río Cuarto, Marcos Juárez y Rosario, formando parte del corredor Mercosur – Chile.
“Es una gran alegría estar presentado una de las obras de mayor magnitud que va a tener nuestra ciudad, la cual unirá a las cinco localidades más importantes del interior en términos productivos y económicos” destacó el intendente, Gil, amigo de Schiaretti, principal impulsor de la Autopista 158. Quién además recibirá 600 millones de pesos para otras obras en su ciudad mediterránea.
La otra localidad favorecida por la autopista 158 es San Francisco. Nido ecológico del actual intendente de la ciudad de Córdoba Martín Llaryora, y actual candidato a gobernador por el PJ en reemplazo de Schiaretti. La autopista conectará San Francisco, no solo con Las Varillas y Villa María, sino también con la autopista Córdoba Rosario. Sólo hasta ese punto, el presupuesto prevé una inversión de 24 mil millones de pesos.
Además se destinarán otros 226 millones de pesos para hacer un nuevo edificio para los Tribunales Federales que funcionan en esta ciudad lindante con Santa Fe, donde recientemente fue baleado el intendente aparentemente por una cuestión de polleras.
Lo propio sucede con Las Varillas. Tierras del actual vice gobernador Manuel Calvo y familia, que ahora tendrán una autopista de doble calzada que unirá con San Francisco, Villa María y la Autopista Córdoba Rosario. Inversión que para ese tramo es de 10 mil millones en el presupuesto.
Y también con Río Cuarto, en manos del schiarettista Manuel Llamosas. Esta ciudad pasará a tener una autovía que lo conecta con la ciudad de Córdoba (Ruta Nacional 36) y la autopista 158 que lo conecta directo a la autopista Córdoba-Rosario. Obra para la cual hay destinados, según el presupuesto, 18 mil millones de pesos.
Finalmente, la última ciudad en capitalizar la nueva autopista 158 es General Deheza. Localidad del sur de Córdoba donde pisa fuerte el empresario aceitero y peronista Roberto Urquia, dueño de Aceitera General Deheza (AGD) y del tren carguero Nuevo Central Argentino (NCA). Señalado de ser lobista de las cerealeras, y el verdadero autor de la Resolución 125, y jefe de este pueblo del sur cordobés donde su mega aceitera AGD manda.
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Según el presupuesto, para el tramo de Villa María – Gral. Deheza hay asignados 18 mil millones de pesos para los próximos tres años. Y al concretarse, no solo traerá mayor conectividad a los habitantes de Gral. Deheza, sino también al fluido tránsito de camiones de cereales que todos los días invaden la ciudad para llevar granos a la aceitera de Urquía, que nunca da una puntada sin hilo. Por esta razón, en su visita a Córdoba como canditado presidencial, Urquía apareció junto al presidente Alberto Fernández, Martín Gil y Caserio. Todos los impulsores de la millonaria autopista.
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Por último, otro distrito que se come un pedazo del pastel del presupuesto es La Falda. Localidad serrana donde se yergue el famoso hotel Eden vinculado al nazismo, que recibirá 2.600 millones de pesos para “obras de reparación y mantenimiento” en la famosa ruta 38. Ruta sindicada por el ex legislador provincial Aurelio García Elorrio, de ser la una de las principales arterias por donde circula cocaína con destino a Europa. Negocio que estaría, según el legislador, en manos de la famosa mafia de la NDrangheta.
La Falda es territorio del caudillo Caserio. Un ex delasotista, ex schiarettista, promotor del discurso victimista cordobés, que desde el 2019 pasó a ser la principal espada de Alberto Fernández en Córdoba, y ahora promueve la precandidatura de Alessandri. Caserio, actualmente es vicepresidente del Banco de la Nación Argentina, y acaba de ser nombrado por el propio Fernández como presidente de la Fundación Banco Nación.
¿Qué manera rara de discriminar a Córdoba?
Más plata pa’ Córdoba
Además de darle a Córdoba 78 mil millones de pesos para obras, el presupuesto nacional 2023, prevé también, gracias a la muñeca de los legisladores cordobeses, no solo una triplicación de los fondos que el ANSES le da a la Caja de Jubilados de la Provincia de Córdoba para solventar su déficit, sino también una cláusula de actualización automática mensual de esos fondos, de acuerdo al índice de movilidad del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA).
De esta manera, mientras en el 2022 el gobierno de Córdoba recibió 12 mil millones de pesos para cubrir un déficit de 55 mil millones de pesos (22%) en su Caja Previsional, este año recibirá unos 36 mil millones. Que se irán actualizando mes a mes, a medida que se actualicen las jubilaciones, con lo cual pasará a cubrir el 62% del déficit actual.
De tal manera, si estos recursos destinados al déficit de la Caja previsional, se ajustarán este año a un módico 70%, Córdoba recibirá unos 61 mil millones de pesos. Y se actualiza en un 100%, como la inflación de este año, los montos destinados a la Caja llegarán a la friolera de 72 mil millones de pesos. La mitad de lo que sale en la autopista 158. Con lo cual, en vez de déficit, la caja pasaría a tener superávit.
Lo más interesante, es que los autores intelectuales de esta iniciativa, que también beneficia a otras 12 provincias, fueron el legislador schiarettista Carlos Gutiérrez, titular del bloque Córdoba Federal, y el ex titular de la Caja de Jubilaciones de Córdoba y actual ministro de Finanzas, Osvaldo Giordano, otro ex Fundación Mediterránea. Mentores del cordobesismo.
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Gutiérrez, mano derecha de Schiaretti en el Congreso, en septiembre del año pasado, antes que se apruebe el presupuesto, había presentado un proyecto de ley para triplicar los recursos que el ANSES transfiere a las provincias para paliar el déficit de sus Cajas previsionales, y actualizar estos de manera automática.
Luego de negociaciones entre Gutiérrez con los equipos económicos del FDT, y de una charla de Schiaretti con el propio Massa, este proyecto fue incluido en los artículos 92 y 93 de la ley del Presupuesto. Cuya aprobación, el gobierno nacional la obtuvo gracias a los votos de los diputados cordobeses que votaron a favor del proyecto del gobierno nacional. Entre ellos el mismo Gutiérrez.
Estos dos artículos del presupuesto, con tonada cordobesa, son otra clara evidencia de la rara discriminación que dice padecer Schiaretti. Quién a través de sus principales espadas legislativas, propone y negocia proyectos con su cruel discriminador, que lo benefician directamente en decenas de decenas de millones de pesos, con indexador automático incluído. Cifra que sumado a los fondos para obras, como el hotel Nº 5 de Embalse y la autopista 158, alcanzará los 114 mil millones de pesos en los próximos tres años.
Por esta millonaria razón, los legisladores Gutiérrez, Natalia de la Sota, e Ignacio García Aresca que responden a Schiaretti, votaron a favor de la Ley de Presupuesto de Massa, “la ley de leyes” como se le dice. Mientras que en el Senado, Alejandra Vigo, esposa y mano derecha del gobernador cordobés, estuvo ausente en la sesión facilitándole así al oficialismo alcanzar quórum y votos por cuenta propia. No obstante se victimizó por Twitter diciendo: “el oficialismo nuevamente enrareció el manejo parlamentario y no estaban dadas las condiciones para debatir un temario que no fue el planteado desde un principio. Por esta razón decidí no dar quórum ni participar de la sesión”.
Vale aclarar, que estos 114 mil millones de pesos que estipula el presupuesto para Córdoba, no computan en modo alguno los miles de millones de pesos que el ANSES destina por mes a jubilados, trabajadores, y niños cordobeses, que también están computados en el presupuesto. Estos alcanzaron, según un informe del ANSES de julio pasado, a 33 mil millones de pesos en jubilaciones y pensiones, 4.800 millones en Asignaciones Familiares y Asignación Universal por Hijo (AUH) y 680 millones en Complemento Salarial. En total 38 mil millones de pesos a julio del 2022, que multiplicada por 13 arroja una cifra de medio billón de pesos al año.
En conclusión, los números muestran que el relato victimizante que instaló en los medios amigos, durante décadas el “partido cordobés”, es falso. Este solo ha sido una efectiva herramienta política, por el cual, mandatarios de turnos, no solo generaron cohesión interna, sino que también trasladaron las culpas de sus errores siempre a otros: “los porteños”, “el puerto”, “los K”. Por eso hoy, Córdoba, una de las provincias más ricas, tiene los mayores índices de desocupación, pobreza y marginalidad del país.
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